Buscaba, miraba, conversaba.
Creía, sabía, podía.
Hablé, logré, enfermé.
Rompí, sufrí, morí.
Esperando, contemplando, divagando.
Estaba, husmeaba, lloraba.
Dormía, temía, reía.
Grité, pregunté, equivoqué.
Abrí, permití, dí.
Entregando, obligando, presionando.
Planteaba, puteaba, involucraba.
Fingía, reprimía, sostenía.
Tomé, desnudé, escuché.
Asumí, corrompí, destruí.
Objetando, criticando, delirando.
Mostraba, empezaba, abrazaba.
Dolía, movía, tenía.
Amé, besé, soñé.
Comprendí, resumí, derruí.
Lastimando, enrostrando, liberando.
“Todo amorío que empieza como aventura fácil y amable y da a la vida tal agradable variedad, acaba siendo, inevitablemente, un problema sobremanera peliagudo que conduce en definitiva a una situación penosa” Anton Chejov
Hello world!
Hace 2 años
2 comentarios:
Las relaciones me recuerdan al viejo chiste de aquel muchacho que va al médico y le dice: "Doctor, mi hermano está loco. Cree que es una gallina", y el médico responde: "Entonces, ¿por qué no lo interna en un manicomio?", y responde: "Lo haría, doctor. Pero necesito los huevos." Entonces eso es más o menos lo que pienso sobre las relaciones. Son totalmente irracionales, locas, y hasta absurdas, pero supongo que continuamos manteniéndolas porque, la mayoría, necesitamos los huevos.
(Woody Allen)
Saluteeee
Pd: Apaga el cerebro por un rato y relajate!
No tiene nada cerebral mi posteo, es una buena forma de expresar algo que es dificil.
Estaba relajadísima cuando lo escribí, pero gracias igual por el aporte
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